jueves, 26 de marzo de 2009

pixela

En cualquier momento movemos un par de fichas y destrabamos el tema del campo en la argentina. Mientras tanto menuda se pixela...

domingo, 8 de marzo de 2009

hombre puente

soles y lunas

El gritaba soles y ella susurraba lunas.
Únicamente coincidían al alba,
y luego en el atardecer.
Pero con eso les bastaba. Y más.

fideos con crema

Una mueca de vómito recorrió la cara de Juan Cruz cuando abrió la heladera. _¿Habrá percibido el tufo putrefacto de los fideos con crema, que desde hacía una semana insistían en el segundo estante?_ Inmediatamente cerró la puerta. Era probable que el mismísimo papá pitufo estuviese encerrado en aquel electro-domestico. Por unos instantes se colgó mirando los azulejos sucios de la cocina . Sobrevino entonces el sentimiento de cambiar su vida. Pensó en dar un giro positivo hacia la decencia, no seguir viviendo así.

Le presto especial cuidado a un grupo de azulejos de por ahí, que estaban como hinchados por dentro, como si fuesen a reventar, como si la pared tuviese algo que decir y su epidermis se lo impidiera. La humedad se colaba por las hendijas de los bordes, pero los azulejos estoicamente insistían y resistían. Había uno encima del lava platos que se estaba ajando en dos. Unos moscos sobre volaban el ambiente._ Esto no da para más._ pensó.

Pediría un crédito al banco para auto financiar la edición de su libro. Compraría semillas para algún día plantar un árbol. En la primera de cambio se mudaba a una casa con patio. Mientras y para no perder tiempo iría criando a los pichones de sauce llorón en las macetas del balcón de su 8vo. 16 de la calle Arenales. ¿Hijos? también, pero en la casa con patio. Tenían que aprobar el crédito.

Para ese entonces JC, se hizo de coraje y se decidió a intentar con la heladera nuevamente. Chupó una bocanada de aire, como para aguantar un buen rato y abrió la puerta. En esta casa la comida se pudría, como la gente en las calles de Bombay. Todo se pudría. Hecho mano al plato de fideos y con un leve sentimiento de culpa los tiró al tacho.

Eran cerca de las doce y se estaba muriendo de hambre.(no mirar)