domingo, 29 de noviembre de 2009

peter eisenman

¿Es esta esa noción de indeterminación a la que usted alude?

Sí, ésa una cualidad que siempre deseo. Significa que no hay principio, no hay final: se mantiene en continuidad. Este proyecto podría definirse con la palabra ‘indecidible’: el espacio es alto, después bajo, luego ancho, luego estrecho… Esa indecibilidad es la que confío que genere entre los usuarios un sentido de libertad que se oponga a la sensación de restricción que trata de imponer normalmente la arquitectura. Colecciono grabados de Piranesi y éstos, con su movimiento, su fluidez, han sido una referencia en este proyecto.

- ¿La realización de este proyecto ha producido alguna nueva idea en su arquitectura?

Nuevas no, diferentes. Ahora estoy trabajando en un nuevo proyecto y un nuevo libro. Tengo entre manos algunas ideas, pero prefiero no detallar de momento. Tengo algunos proyectos que se limitan simplemente a complacer a clientes que quieren ‘un Eisenman’y, como Eisenman no tiene ideas nuevas cada día, repetimos algo que ya hayamos hecho antes. Mi proceso de trabajo actual consiste en revisar ideas antiguas y revisitarlas. Yo soy totalmente contrario a la idea de ‘lo nuevo’. No considero por eso la Ciudad de la Cultura un nuevo proyecto, ya que para cuando esté construido representará una idea antigua, pero no será viejo, sino que mantendrá una cierta cualidad más allá del tiempo.

¿estaría la arquitectura atravesando una crisis?

Estamos ‘fuera de tiempo’. Es un mal momento, muy poco interesante, pero no creo que la arquitectura esté sumida en una fase crítica. Va a sobrevivir, pero va a tener que cambiar. Deberíamos tratar de situarnos en nuestro tiempo, y entender qué significa. Vivimos en una época de incertidumbre: el post-estructuralismo nos dejó sin verdades, tampoco hay dios. ¿En qué vamos a creer? ¿Cómo vamos a tener ideales que importen si no hay verdad, ni valores trascendentales y cuando nos desplazamos de lo trascendental a lo inmanente también pasamos a territorio peligroso?

p. eisenman

art. completo aquí

mantis



la mantis religiosa hembra tiene por costumbre comerse al macho de su especie luego de haber sido fecundada.

manifiesto al canibalismo (mi cena)

Pregunté a un hombre lo que era el Derecho. Él me respondió que era la garantía del ejercicio de la posibilidad. Lo devoré.
Sólo la Antropofagia nos une. Socialmente. Económicamente. Filosóficamente.

Única ley del mundo. Expresión enmascarada de todos los individualismos, de todos los colectivismos. De todas las religiones. De todos los tratados de paz.
Tupi, or not tupi, that is the question.
Queremos la Revolución Caraiba. Más grande que la Revolución Francesa. La unificación de todas las revueltas eficaces en la dirección del hombre

Pero no fueron cruzados los que vinieron. Fueron fugitivos de una civilización que estamos devorando.
Las migraciones. La fuga de los estados tediosos. Contra las esclerosis urbanas.
Antes de que los portugueses descubrieran al Brasil, Brasil había descubierto la felicidad.
Filiación. De la Revolución Francesa al Romanticismo, a la Revolución Bolchevique, a la Revolución Surrealista y al bárbaro tecnificado de Keyserling. Caminamos…

Contra la realidad social, vestida y opresora, la realidad sin complejos, sin locura, sin prostituciones y sin las prisiones del matriarcado de Pindorama.
Contra todas las catequesis. Y contra la madre de los Gracos.
Sólo me interesa lo que no es mío. Ley del hombre. Ley del antropófago.
Contra las historias del hombre que empiezan en el Cabo Finisterra. El mundo no datado. No rubricado. Sin Napoleón. Sin César.
Contra la Memoria fuente de la costumbre. La experiencia personal renovada.
Somos concretistas. Las ideas se apoderan, reaccionan, queman gentes en las plazas públicas. Suprimamos las ideas y las otras parálisis. Por las rutas. Creer en las señales, creer en los instrumentos y en las estrellas.
Contra el mundo reversible y las ideas objetivadas. Cadaverizadas. El stop del pensamiento que es dinámico. El individuo víctima del sistema. Fuente de las injusticias clásicas. De las injusticias románticas. Y el olvido de las conquistas interiores.

Rutas. Rutas. Rutas. Rutas. Rutas. Rutas. Rutas.


Andrade,
Oswald de. Manifiesto antropófago.

Revista de Antropofagia, Año 1, No.1, mayo 1928.

jueves, 19 de noviembre de 2009

la manada nodamas de tanto nomadismo


listo, hecho, listo, hecho!





imagenes de un estudio itinerante...
gracias gente por todo el laburo!

sábado, 14 de noviembre de 2009

viernes, 6 de noviembre de 2009

phantom warrior

de la serie de hombres puente

"Más elevado que el amor al prójimo es el amor al lejano y al venidero; más elevado que el amor a los hombres es el amor a las cosas y a los fantasmas.
Ese fantasma que corre delante de ti, hermano mío, es más bello que tu; ¿por qué no le das tu carne y tus huesos? Pero tú tienes miedo y corres hacia tu prójimo."

Del amor al prójimo - Así hablo Zaratustra -
Friedrich Nietzsche